jueves, 8 de agosto de 2013

8/8


Hoy de nuevo he visto a MAR. ¿Será casualidad que hayamos quedado un 8/8? Seguramente sí. Ha sido hace poco cuando me he enterado que el 8 de agosto hay quien conmemora el día del spanking por aquello de la forma que recuerda el 8 a dos nalgas juntas, supongo.

En cualquier caso, tal y como era de prever, quedar con MAR ha resultado ser un verdadero lujo. Además estaba guapísima, muy animada y en cierto momento ha sacado una adquisición de hoy un cinturón negro que perfectamente podría ser usado en una sesión de BDSM. Así que en el fondo sé que ha sido una mera casualidad haber quedado un 8/8 pero también sé que lleva, que llevamos, nuestros papeles muy interiorizados. Ella sólo podría ser Ama y yo sólo podría ser sumiso... su sumiso.

Hacía un par de meses que no nos veíamos y los dos teníamos algo para el otro. Me ha regalado un libro de masajes en el que posó como modelo. De nuevo está preciosa y yo soy un privilegiado. Y aunque no son masajes precisamente relajantes intentaré mejorar mi técnica, aunque para eso no hay nada como la práctica.

Y yo a Ella le tenía preparada la sorpresa de hablarle por primera vez de la existencia de este blog. ¡Dios mío! Ver su cara de sorpresa no tiene precio. Me hubiera encantado habérselo dicho hace un par de meses, cuando lo empecé, pero la espera ha merecido la pena.

Por una parte siento que esto haga reaparecer de alguna forma a helmut en su vida cuando ya había tomado la decisión de apartarlo de su vista, pero por otra parte, los dos sabemos que a la vista o no, helmut sigue existiendo dentro de mí, así que puede que ésta sea la mejor manera de darle salida a determinados sentimientos míos y que lleguen a MAR sólo si Ella quiere.

A poco tiempo de mi cumpleaños he tenido ya el mejor regalo: ver a MAR, pasar un rato charlando y viéndole reír y despedirme convencido de haberle hecho uno de los regalos más originales de su vida y de la mía.

Es fantástico hacer un regalo, que lo acepten sin resistirse y que además guste de verdad.
En esos casos la mejor sensación puede que se la lleve quien hace el regalo más que el que lo recibe.

Deseando volver a repetir un día como hoy lo más pronto posible me despido muy feliz.

A los pies de MAR.
helmut

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