Viejo llavero nuevo

Recientemente he cambiado de casa, lo que ha implicado hacer mudanza, incluido llevar todos los juguetes a un nuevo lugar secreto, un nuevo baño en el que poder hacerme las fotos que tanto gustan a MAR, etc.

Pero la entrada de hoy tiene que ver con las llaves. El llavero en el que tenía las de la que ya es mi antigua casa era un perro. Un llavero comprado con toda la intención del mundo hace dos años como símbolo de lo que soy de MAR (su perro) y también como expresión del suspiro que se me escapa cada vez que veo una foto suya ("GUAUU").

Lo gracioso es que la dueña de mi nueva casa me ha dado un juego de llaves y el llavero es... ¡otro perro! Yo creo que algo intuye de mi lado sumiso pero me temo que no sabría apreciarlo y aunque así fuera, ya es tarde para ella, que este perro ya tiene AMA.

Me ha hecho gracia la coincidencia de llaveros pero creo que me quedaré con el que ya tenía aunque lo reestrene con nuevas llaves. Pero me quedo con el mío que es igual que uno que tiene MAR y, además, me recuerda a diario lo sumiso que soy y a quien pertenezco.

A los pies de MAR.
helmut{MAR}